Los
periodistas independientes afirman que las redes influyeron, pero que no fueron
determinantes. En cambio, el gobierno cree que
la derrota del Sí es consecuencia de las mentiras difundidas en las
redes.
Ignacio
Vera Rada
Frente a la posición gubernamental en
sentido de que las redes sociales fueron determinantes en la derrota
oficialista en el referéndum del 21 de febrero, Valverde dijo que “las RR.SS.
no ganan elecciones, nunca lo harán…”, pero aclaró que “lo que ha pasado en
esta ocasión ha sido la manifestación de la indignación de los bolivianos al
enterarse de un posible tráfico de influencias que debe ser investigado”. Al
mismo tiempo, apuntó que“el pueblo boliviano está ya molesto de un gobierno que
cada vez se va desgastando más y más.”
Valverde es el comentarista cruceño que
reveló la relación entre el presidente Evo Morales y Gabriela Zapata, y entre
ésta y la empresa china Camc, que se adjudicó contratos con el Estado boliviano
por más de 500 millones de dólares. Este caso fue uno de los temas más
comentados en las redes sociales en lo que va del año.
La periodista Amalia Pando dice que “las
RR.SS. son herramientas fenomenales para la comunicación. Creo firmemente que
no son las causantes de la derrota del Sí en el referendo. Las RR.SS. son
además espacios para la democracia, el debate y el intercambio de opiniones.”
Asimismo, Pando se pronunció respecto a
la iniciativa de regular las RR.SS. “Estoy totalmente en contra de la iniciativa
de regular las redes, eso sería atentar contra la libertad de los ciudadanos de
expresarse”, dijo y agregó que si se concretarala iniciativa oficialista “estaríamos
viviendo algo muy cercano a un totalitarismo”.
La iniciativa para regular las redes
sociales surgió entre los sindicatos cocaleros del Chapare y en la Asamblea
Legislativa. La idea ha generado la oposición de los partidos opositores y
también de los activistas sociales, además de una buena parte de los usuarios
de redes sociales.
En el gobierno existe el convencimiento
de que las redes sociales fueron determinantes en la derrota de Morales en el
referéndum en el que buscaba aval ciudadano para postular a un cuarto mandato.
El ministro de Trabajo, Gonzalo Trigoso,
opinó que “las RR.SS. han jugado un papel nefasto para la imagen del
Presidente. Cualquier ciudadano boliviano sabe quelas redes estaban plagadas de
mentiras, de calumnias…”. Agregó al final que “no hay duda de que las RR.SS.
han hecho que el Sí pierda”.
Varios otros ministros de Estado y muchos voceros del gobierno de turno también
han manifestado su repugnancia por los contenidos publicados en las RR.SS. en
días preelectorales. La ministra de Comunicación, Marianela Paco, planteó la
necesidad de “revisar y debatir” el uso de las redes. El ministro de Defensa,
Reymi Ferreira, dijo que en las RR.SS. hay solo “ataques de la oposición”.
Hace pocos días, el procurador general del Estado, Héctor Arce Zaconeta,
ha dicho que las RR.SS. fueron “mentirosas y falsas, y dañaron el prestigio del
gobierno”.
Desde más o menos diciembre de 2015 se
han inundado las RR.SS.de publicaciones relacionadas al referendo, las más eran
contrarias al Movimiento Al Socialismo (MAS). Pero sucedió que a comienzos de
febrero del presente año, el periodista Carlos Valverde anunció en un programa
de radio que la señora Gabriela Zapata Montaño, expareja del presidente Evo
Morales, habría incurrido en un presunto tráfico de influencias al ser ella
gerente de la empresa china CAMC, con la que el Estado boliviano tiene
contratos. A consecuencia de esto, las RR.SS. se inundaron de protestas de la
población reprobando este pleito.
Las RR.SS. cada día tienen un peso más
importante en la cotidianeidad. Día a díamuchas personalidades emiten
opiniones, juicios o acusaciones a través de sus cuentas en Facebook y en
Twitter. Algunos días después de la contienda electoral, se confirmó el triunfo
del No a la reforma constitucional. Los resultados fueron los siguientes: No =
51%; Sí = 49%. El gobierno entonces salió a los medios de comunicación para
decir que la derrota del Sí había sido injusta, pues algunos medios de
comunicación habrían tergiversado las cosas referentes al “caso Zapata” para
difamar la imagen del Presidente.